S

 

Sabañones:

Un buen remedio contra ellos es frotarlos con un nabo partido por la mitad.

Sal:

Para evitar que la sal se humedezca, podemos echar un puñado de arroz dentro del salero.

Si no puedes tomar sal, el tomillo y la mejorana, son dos buenos sustitutos.

Salchichas:

Es aconsejable pincharlas antes de cocerlas o asarlas, de esta forma evitarás que se abran o que “estallen”, además soltarán su grasa y resultarán menos indigestas, además de engordar menos.

Salchichón:

Para evitar que se seque el ya empezado, basta con untar la zona expuesta al aire con un poco de aceite.

Salsa:

Si tienes que calentar una salsa que ha quedado algo espesa y temes que con el calor se espese aún más, caliéntala un poco al baño maría sin dejar de remover.

Sangre:

Para eliminar las manchas, si es reciente, frótalas enseguida con agua fría a la que habrás añadido unas gotitas de agua oxigenada. Si la mancha ya está seca lávala con agua y detergente y déjala en remojo durante 24 horas.

Sangría:

Un truco para conseguir una sangría “especial” consiste en sustituir el vino blanco por cava.

Sartenes:

Cuando estén muy sucias por dentro y con el jabón y estropajo no te quedan bien, prueba a ponerlas al fuego con una cucharadita de amoníaco y un poco de agua y déjalas cocer cinco minutos; luego, friégalas normalmente.

Satén:

Al lavar un tejido tan frágil como el satén no hay que olvidar nunca de echar en el agua del último aclarado un chorrito de vinagre y un terrón de azúcar. La prenda deberá extenderse sin haberla escurrido, y el planchado se efectuará cuando esté todavía húmeda.

Seda:

La seda ha de lavarse siempre con agua templada, casi fría. Después, en el agua del último aclarado, conviene echarle unas gotas de zumo de limón y un poquito de azúcar, para que no se ponga amarilla.

Para evitar que se ponga amarilla, hay que meterla en remojo, en leche descremada, antes de lavarla. O bien añadir dos cucharadas soperas de leche en el agua del último aclarado.

Las blusas de seda deben lavarse con agua templada y jabón suave. Después del aclarado hay que echarles un chorrito de vinagre y envolverlas en una toalla seca. Por último, antes de que se sequen del todo, plánchala con una plancha seca.

Sellos:

Si has conseguido un sello único y éste está aún adherido al sobre, para despegarlo de allí, basta con que coloques el sobre  una cacerola con agua hirviendo. El vapor de agua lo despegará casi al instante.

Semillas:

Para que estas germinen más deprisa disuelve en el agua una píldora anticonceptiva.

Otra forma es depositarlas en un recipiente lleno de posos de café húmedos y dejarlas durante una semana. A la hora de sembrarlas se extenderán mejor, y además el café servirá de abono.

Las semillas de pequeño tamaño se siembran mejor si se mezclan previamente con arena fina.

Senos:

Mirar pechos

Setos:

El otoño es el momento adecuado para hacer el último recorte de ellos.

Sueño:

Según especialistas, dormir con la cabeza en dirección al norte favorece el flujo sanguíneo y el sueño. Dormir con la cabeza en dirección a otros puntos cardinales, aumenta el nerviosismo, la irritabilidad y el insomnio.

Si estás nervioso/a y no puedes dormir, un buen masaje en el cuero cabelludo con la yema de los dedos puede ser la solución.

Algunos trucos para el insomnio: Comer una manzana, tomar lechuga en la cena, tomar un vaso de leche templada antes de acostarse,  beber un vaso de agua con azúcar. Darse un buen baño de agua caliente también es recomendable.

T

 

Talones:

Un buen remedio para combatir la sequedad y rugorosidad de la piel de los talones es aplicarse, por espacio de 10 minutos, un algodón empapado en aceite de oliva, tras lo cual deberás frotarte la zona afectada con limón.

Té:

Las manchas de té en los tejidos blancos, se eliminan con agua jabonosa y unas gotas de limón. Si quedasen restos, se debe de poner la prenda en remojo con agua y lejía.

Tender:

Para no marcar una prenda con las pinzas de tender, y se trata de una camisa o jersey muy delicados que no queremos planchar, podemos colgarla utilizando un panty o un leotardo. Para ello, introduce cada uno de los extremos del panty por una manga y saca la cintura por el cuello de la prenda que quieres colgar. Después se cuelga poniendo las pinzas en los extremos del panty, que sujetará la prenda mientras se seca.

Tinta:

Para quitar las manchas de tinta bastará con que frotes la misma con un algodón o paño empapado en alcohol de 90º.

El mejor remedio es rociarlas con laca para el pelo y frotar luego con un paño seco. Si el tejido es de poliéster desaparecerá la mancha. Si aún es rebelde, frótala con alcohol y luego lávala.
Las manchas de "tinta y bolígrafo" desaparecen si se tratan localmente con jugo de limón, sal o con yogur, y posteriormente se lava la prenda con agua tibia.
Si son recientes bastará remojar la zona manchada en leche apenas caliente y luego lavar toda la prenda.
 Si tienes una mancha de tinta de bolígrafo o pluma en el piso, sólo agrega un poco de alcohol; déjalo por unos 5 minutos y desaparecerán las manchas...

Toallas:

Si tus viejas toallas parecen estar anticuadas, hay un método que puede hacerlas rejuvenecer: en los bordes, hazles una puntilla de ganchillo no muy ancha y en el mismo color o tono que la toalla. Parecerán nuevas y mucho más modernas.

Tomate:

La salsa de tomate perderá acidez si le añadimos un poco de azúcar mientras está en el fuego. Si no puedes consumir azúcar, añade en vez de esta, una zanahoria como un componente más de la salsa.

Los tomates demasiado verdes pueden madurar en casa dejándolos durante unos días en una ventana soleada. También pueden ser envueltos en papel de periódico y guardarlos unos días fuera del frigorífico, hasta que estén en las condiciones deseadas.

Los tomates al horno conservarán su forma poniéndolos dentro de moldes para magdalenas.

La mejor forma de que conserven todo su sabor es manteniéndolos al aire libre.

Cada vez que el contenido de un bote de salsa de tomate no se consuma en su totalidad, debemos poner lo que haya sobrado en un frasco de cristal, sin tapar y meterlo en el frigorífico. También se puede dejar en el mismo recipiente que trae, siempre que el bote de hojalata tenga su interior plastificado, pero con la precaución de echarle un chorrito de aceite para que impida que el contenido del bote entre en contacto con el aire.

Tortilla:

Para que queden muy esponjosas, usa siempre una sartén muy bien engrasada y una espátula de madera para mover los ingredientes.

Tos:

Mirar catarro

Transpiración:

Las manchas producidas por la transpiración se eliminan de los tejidos de lana dejándolos en remojo, en agua fría con un chorrito de vinagre, antes de ser lavados con el detergente habitual.

Tulipanes:

Cuando el tallo de un tulipán no se curve dentro del florero, lo mantendremos bien apretado dentro del papel de la floristería, durante media hora.

Para que los tulipanes no parezcan tristones dentro de un jarrón, hay que colocar dentro del recipiente una moneda amarilla.

U

 

Uñas:

Entre los elementos causantes de la coloración de las uñas se encuentran el hábito de fumar, la herencia, una mala nutrición, infecciones o el uso constante de esmalte de color.
Puedes blanquearlas, remojándolas en una taza de agua con unas gotas de peróxido de hidrógeno (agua oxigenada), durante 10 ó 15 minutos, una vez a la semana.

Para evitar que el esmalte de las uñas se seque, frota el interior del tapón de vaselina. De esta manera no se pegará al frasco, siempre cerrará perfectamente y evitarás que el contenido se seque por evaporación.

La mejor lima es la de cartón, ésa que suelen llamar de esmeril. La de metal suele abrir y deteriorar el borde de la uña.

Las uñas deben de limarse cuando estén bien secas.

Para conservar mejor los esmaltes de uñas, evitando que se espesen, deben de meterse en la nevera.

Si un esmalte se ha vuelto demasiado espeso, puedes recuperar su textura poniéndolo bien cerrado en un recipiente con agua hirviendo.

V

 

Vaqueros:

Para achicar unos vaqueros: Lavarlos en agua caliente.

Un remedio para evitar que los vaqueros les salgan marcas descoloridas consiste sencillamente en lavarlos del revés, añadiendo al detergente habitual un cubito de detergente de lavaplatos. Ojo, no meter en la lavadora ninguna otra prenda, pues se echaría a perder.

Para que se adapten perfectamente al cuerpo, hay que meterlos primero en agua con sal y dejarlos secar un poco. Después, y cuando aún estén húmedos, hay que ponerlos y permanecer con ellos puestos hasta que se sequen del todo.

Para evitar que encojan, lávalos siempre con agua fría. Y para impedir que destiñan, sólo tienes que echar sal en el agua del aclarado.

Si unos vaqueros recién comprados son puestos en remojo durante 12 horas, en agua salada, conservarán siempre su color original.

Valeriana:

La raíz de valeriana nutre el sistema nervioso y tiene propiedades calmantes. La valeriana es una ayuda segura y natural para dormir. Ayuda a calmar los nervios y asiste al cuerpo en aliviar el insomnio. Esta planta ha demostrado el entregar alivio calmante a los músculos, los nervios y los vasos sanguíneos.

Verduras:

Un truco sencillo para recordar cuáles son las verduras que deben taparse mientras se están cociendo y cuáles no es el siguiente: Todo lo que crece bajo tierra (patatas, zanahorias.....) debe taparse; y todo lo que crece por encima (coles, judías verdes.....) no debe taparse.

Vinagre:

Si quieres elaborar un vinagre especial y aromatizado, déjalo macerar durante un par de semanas con la hierba que prefieras (laurel, eneldo, romero.....). Notarás una apreciable y deliciosa diferencia en tus ensaladas.

Vino:

Las manchas de vino en las camisas o manteles son muy difíciles de eliminar. Conviene, si es posible, poner sal sobre la mancha nada más derramada esta. Luego se remojará la prenda en leche caliente, antes del lavado. Después del mismo, y si el tejido lo admite, la lejía terminará con los últimos restos. También pueden eliminarse sumergiendo las zonas manchadas en amoníaco y agua, a partes iguales, con el añadido de un chorrito de agua oxigenada.

Z

 

Zapatos:

Los zapatos de charol te quedarán perfectos si los limpias con crema para las manos, los embadurnas bien y les sacas brillo con un trapo de algodón seco. Se conservarán mejor limpiándolos con leche mezclada con jugo de limón.

Las alpargatas deben limpiarse con un jabón líquido del que se suele utilizar para las alfombras. Primero se aplica el producto con un cepillo. Después, cuando las alpargatas estén secas, deben volverse a cepillar.

Los zapatos de ante suelen ponerse lustrosos, sobre todo con el permanente roce de los pantalones. Pásales con suavidad un papel de lija fino, y el ante volverá a estar como al principio.

Una clara de huevo batida a punto de nieve resulta muy eficaz para limpiar zapatos de cuero de colores claros. Extiéndela con delicadeza y frota después con un paño suave.

Las zapatillas deportivas quedan mucho más limpias pasándoles una toallita de papel como las que se utilizan con los bebés.

Si los zapatos destiñen y te ensucian los pies, unta la parte interior con una crema incolora. Sólo hay que esperar a que se seque.

Usando crema nivea, la limpieza de los zapatos durará más tiempo y además, no mancharás las medias.

Cuando se estrenan zapatos existe siempre el riesgo de resbalarse y caerse. Para evitarlo, hay que frotar la suela con un trozo de patata pelada cruda. Si te aprietan, agrándalos colocándolos encima de un recipiente con agua en ebullición. Cuando el cuero haya quedado flexible es el momento de volverlos a poner.

Para que las zapatillas de tela no se ensucien tan rápidamente como suelen hacerlo, hay que rociarlas con almidón.